lunes, 14 de julio de 2008

ORILLAS




Vuelvo a ver la casa sin techo

con unos pocos adobes apilados

y cada vez que paso por allí

es como reencontrar flamencos

en los libros de cuentos…


Aparecen

los juegos

los caracoles

las uvas robadas

en el calor de una siesta

mientras los padres duermen

el sueño pesado y cansado

que lleva Argentina

los niños viven

un mundo de orillas…


Danhir





2 comentarios:

Víktor Gómez Valentinos dijo...

Danhir:

Un paréntesis estival
para saludarte, para
asir la nave de los desplazados,
para concordar en tu labio
con un verdor de agua invicta.

Un sublevado canto coral,
hermana nocturna, qué el día
con la noche no tiene pared
y mi oscura canción
vierte su ira y ternura
entre los márgenes de tu voz
y un mundo a la deriva.


Un abrazo,

Viktor

Nocturna dijo...

Siempre es un placer recibirte, Viktor querido...

Afortunadamente nos conocimos sin paredes a través de este medio y sé que juntos entonamos, a pesar de la distancia, la misma melodía.

¡Un abrazo fraterno, amigo!