viernes, 13 de junio de 2008

DESDE EL PISO DE ARRIBA




Suelen introducirse por los oídos.




El punto de elasticidad

del techo combo que observo

está llegando al límite

bajo esa alfombra

que acumula golpes secos...


Él duerme a mi lado

sin saber que corre el riesgo

de trasponer las fronteras del descanso.



Danhir




4 comentarios:

Anónimo dijo...

Hay riesgos que, proceden del piso de arriba o del límite plateado de las sombras, es necesario correr.

Un beso.

Pakous dijo...

huuuyyy, yo creo que un arreglillo a la casa no estaría mal. Por lo menos a esa techumbre que se desmorona...
Me ha encantado el relato lírico que me has ofrecido.
unos besos....
más besos.

Nocturna dijo...

¡Ups!

Si las piernas pudieran correr, lo haría... pero muchas veces los sueños me impiden correr, Javier.

Un abrazo grande

(:

Nocturna dijo...

Pako:

Cada vez que interpretas mis sueños sos el sinónimo de la alegría que transforma mis pesadillas en cosas "nada graves".

¿Cómo no dedicarle un poema a mi "muso"?

¡Te mereces mucho más, amigo!

¡Besos!