lunes, 9 de junio de 2008

DERIVADAS


No pudo aborrecer al destino

pues ni siquiera creía en él.


Permaneció inmóvil,

el resto de sus días,

con las ganas

de derivar a otros

sus culpas extrañas.


Danhir






2 comentarios:

Víktor Gómez Valentinos dijo...

Querida poeta, un retrato imparcial del daño impersonal que uno a uno, nos zarandea.

Buena semana.

Tu Viktor

("existe un mutilado, no del combate sino de un abrazo" César Vallejo)

Nocturna dijo...

Gracias por la cita, Viktor...

Tú siempre me traes abrazos sin mutilaciones...

(: