miércoles, 14 de mayo de 2008

A SU MERCED


Espacios cohabitados

por infinitas generaciones de mortandades

en las que ahora, ellos

son libres de saldar las cuentas inconclusas.


Danhir







8 comentarios:

aapayés dijo...

Esta bonito el poema, como siempre, un saludo

AliaS dijo...

linda, con vos suelo tomarme el tiempo para recorrerte... y siempre hay un aroma silente, ramilletes de jazmín tardes soleadas aunq sea otoño y la noche caiga. bss

Nocturna dijo...

Buenas noches, Adolf.

:)

Nocturna dijo...

Alias:

¿"Aunque" sea otoño y la noche caiga?

Esa conjunción adversativa quedaría más acorde si en mi caso te refirieras al verano o al día.

Sólo se tratan de diversas perspectivas, niño.

:)

Pakous dijo...

... y salieron de los torreones
centenares de luciérnagas
ávidas de añoranzas
anticipando tu destino...
neodanhir

Nocturna dijo...

Sí, Pako...

¡Luciérnagas que me envías tú, amigo!

(:

Víktor Gómez Valentinos dijo...

Bajísima nube. Enraizada en el olvido. Fruta madurada de fragil errancia.

Una madre que es música llora.

Con el río se vuelve a lo impenetrable.

Tanta transparencia nos daña.

Tu Vikor

Nocturna dijo...

Viktor:

Un placer leerte, llenas de poesía complementaria los comentarios.

¡Besos!

(: